Con el corazón desbordante de fe y un amor inmenso, nuestras Casas Salesiana San José de Usme IED, Chuniza Famaco Ied, Bilbao IED y La Estrellita IED, se vistieron de fiesta para celebrar a nuestra madre María Auxiliadora, la Maestra que guía nuestros pasos. La veneración a la Virgen marcó un hito de unidad y espiritualidad para toda la comunidad.
Desde tempranas horas, la emoción era palpable. Estudiantes, padres de familia y docentes, se unieron en un solo espíritu para honrar a nuestra Auxiliadora. Las procesiones se tiñeron de color y fervor, con cientos de manos elevando flores y oraciones, acompañando con cánticos el andar de la imagen de la Virgen.
El aire se llenó de música, danza y expresión artística, gracias al compromiso y talento de nuestros estudiantes y docentes. Con dedicación y cariño, prepararon muestras artísticas que fueron un regalo de gratitud a María. Cada coreografía, cada nota musical, cada verso recitado, era una manifestación pura del amor que anida en nuestros corazones por la Maestra Auxiliadora. Ver a nuestros jóvenes expresar su fe a través del arte es un recordatorio poderoso de la riqueza de nuestra herencia salesiana.
Este día no solo fue una fiesta, sino también una profunda reafirmación de nuestro compromiso como Casa Salesiana. Guiados por el Sistema Preventivo de Don Bosco, que se fundamenta en la razón, la religión y el amor, buscamos formar "Buenos Cristianos y Honestos Ciudadanos". La figura de María Auxiliadora es el pilar de este sistema, inspirándose a acompañar, proteger y guiar a cada niño, niña y joven con ternura y firmeza, como ella lo hizo con Don Bosco.
La masiva y emotiva participación de padres y estudiantes en cada actividad es el reflejo más hermoso de que el espíritu de Don Bosco y Madre Mazzarello sigue vivo, y que el amor a María Auxiliadora es un lazo que une y fortalece nuestra gran familia.